Contribuye con tu firma

Parecía que nunca iba a llegar y, sin embargo, ya está aquí. Cuando menos la esperábamos, en los tórridos meses de verano y al comienzo de la cuesta de septiembre, se ha presentado en nuestros buzones la factura de la contribución, en una carta con membrete municipal y remite de oficinas municipales. No viene acompañada de la repetida foto sonriente de nuestra alcaldesa, como otras innumerables cartas que han inundado los buzones torrentinos en los últimos meses para explicarnos lo bien que nos va y la de cosas que dicen que se hacen. Las malas noticias, mejor que no tengan remitente, y esta carta llega sola, a modo de recibo, plagada de números y letras que a muchos se nos hacen difíciles de interpretar. Pero cójala usted y coja también el resguardo del recibo del año pasado e intente hacer una sencilla operación matemática. Vea lo que pagó el año pasado y, después de enfadarse al ver lo que tendrá que pagar éste, reste las cantidades; entonces sabrá cuál es la diferencia. Si quiere calcularlo en porcentajes, multiplique por cien la cantidad de este año, la que provoca su enfado, y a continuación divida el resultado entre la cantidad que pagó el año pasado. Todo lo que pase de cien en ese último resultado es el porcentaje que le ha subido la contribución. Si es usted afortunado o afortunada, el resultado final será de 10, de 12 o de 16. Entonces, usted está en la media que dicen que se produce en Torrent. Pero no se pase de optimista, porque en realidad usted pagará una subida muy por encima del índice de subida de precios del último año, índice que ya fue alto (un 4,2%). Si usted no tuvo tanta suerte, verá que el resultado final es de 20, o de 30, o de 40… o de 70, o incluso de cien. Hasta el doble pagarán muchas familias de Torrent porque el gobierno municipal no tuvo la previsión de bajar el coeficiente que se aplica al valor catastral de nuestros bienes inmuebles. Les confieso que yo, de impuestos de bienes inmuebles, hace unos meses sabía más o menos lo mismo que usted y que la mayoría de la gente; o sea, bien poco. El ayuntamiento tiene la posibilidad de subir o bajar la contribución aplicando un coeficiente que puede variar entre el 0,4% y el 1,1% del valor catastral, y el ayuntamiento no ha bajado el coeficiente en 2008 porque no ha querido. Por eso estamos recogiendo firmas en la calle, y por eso le animamos a que contribuya con su firma a la bajada de la contribución en 2009. Por eso y porque vemos cada día que nuestros vecinos no soportan la falsedad de quienes prometieron menos impuestos y nos han arreado un recibazo en pleno mes de agosto.