España permite la entrada de extranjeros pero prohíbe los desplazamientos internos

La polémica está servida entre España y la Unión Europea. La Comisión Europea ha pedido al gobierno de Sánchez "coherencia" en las restricciones de viaje que aplica dentro del territorio nacional y  no con respecto a los desplazamientos desde y hacia otros países de la UE, ya que "los riesgos vinculados al coronavirus son similares ya sean los viajes interiores o transfronterizos".

A esta petición contestó la ministra de Sanidad, Carolina Darias, "contamos con protocolos comunes en el ámbito de la UE que permiten la movilidad entre países. Los extranjeros que llegan a España vienen con una PCR negativa, por lo que hay un elemento de seguridad en ese desplazamiento". Hay que recordar que las comunidades autónomas están perimetradas y están prohibidos los desplazamientos entre territorios, pero no la llegada de extranjeros a cualquier comunidad, esta medida está siendo criticada por la Unión Europea que ve una doble vara de medir.

Los extranjeros que quieran pasar sus vacaciones, tanto en la Comunidad Valenciana como en el resto de autonomías tan solo tienen que presentar un PCR negativo, que en Francia, por ejemplo es gratuita, pero no lo pueden hacer los propios ciudadanos españoles para salir de su región.  Por contra, los españoles que tienen perimetradas sus autonomías, sí pueden viajar a cualquier país europeo, "siempre que cumplan con las restricciones y las medidas impuestas al país al que se desplazan" ha aclarado la ministra Darias.

Esta contradicción la explica la ministra de Turismo, Reyes Maroto, "los extranjeros vienen con PCR y eso no se puede garantizar en los viajes en la Península". Reconoció que "no se tiene capacidad de control para los viajes nacionales, mientras que, como el 80% de los internacionales llegan en avión, es más sencillo establecer controles sanitarios de este tipo".

La Comunidad Valenciana tiene, a día de hoy, la incidencia acumulada más baja de España y está recibiendo turistas de países como Alemania o Francia donde su incidencia se ha duplicado y triplicado respectivamente en esta última semana