Torrent celebra la festividad de la Virgen del Rosario

El primer fin de semana de mayo Torrent celebra la festividad de la Virgen del Rosario gracias al esfuerzo de jóvenes que cada año conforman una de las clavarias más antiguas de la capital de l'Horta Sud. Este año han sido 18 los jóvenes que se han encargado de sacar adelante esta fiesta centenaria. Esta clavaría la forman jóvenes de entre 18 y 20 años solteros. La jornada festiva comenzó con una solemne eucaristía. Ya por la tarde, la Virgen del Rosario salía en procesión por las principales calles del casco histórico de Torrent acompañada por los 18 jóvenes de la clavaría de 2018. Los concejales del PP fueron los únicos representantes del Ayuntamiento que participaron en la procesión ya que el alcalde, Jesús Ros y algunos miembros de su equipo de gobierno acudieron pero como público. También participaron un pequeño grupo de niños vestidos de comunión.

Noche de enrramaes

El primer sábado de mayo también se celebra les "enrramaes". Esta tradición consiste en ir a visitar a las madres y novias para rendirles homenaje con canciones y llenar de pétalos de rosa los portales de las viviendas. Así hasta bien entrada la madrugada grupos de jóvenes subidos remolques movidos por tractores se mueven de una punta a otra de la ciudad para cumplir con esta tradición también centenaria y que todavía persiste en la capital de l'Horta Sud.

Sin murta en la procesión

Pero este año la clavaría de la Virgen del Rosario se ha visto obligada a no repartir la tradicional murta que se tira antes de cada procesión a lo largo de su recorrido. El motivo ha sido la reducción de la subvención que el Ayuntamiento entrega cada año a esta clavaría. A principios de octubre del 2017, según relatan los propios clavarios, mantuvieron una reunión con el ya ex-concejal de Fiestas, Alfred Costa, para tratar este tema.

En dicha reunión  se acordó una subvención de 1.200 euros a cambio de que la clavaría no organizase ningún tipo de acto o fiesta para recaudar dinero y a cambio de colaborar en la organización de la Cabalgata de Reyes, cosa que hicieron cargando los sacos de caramelos en los autobuses para después repartirlos.

La sorpresa viene cuando a menos de una semana de la fiesta les informan que la subvención se reduce a la mitad unido a que la murta, que normalmente facilita el  Consell Agrari, ya no la facilita por lo que tenían que "buscarse la vida" tal y como nos cuentan los propios clavarios. La falta de tiempo y los 150 euros que cuesta el reparto obligaron a este grupo de jóvenes a prescindir de ella, lo que sorprendió a los torrentinos que acudieron a ver la procesión.