“Ha sido horrible. Empezamos a correr sin saber dónde ir”

Recién casados y con una semana de relax por delante, no imaginaban que iban a vivir tan de cerca el terror del Estado Islámico. La pareja estaba esperando a que se hiciera la hora de subir al avión cuando de repente “escuchamos un ruido muy fuerte y comenzamos a ver al personal del aeropuerto correr. Nosotros también empezamos a correr sin saber donde ir”, relata esta joven torrentina recién casada que prefiere no dar su nombre.

Según ha contado al periódico LA OPINIÓN, “Nos fuimos a la otra punta del aeropuerto. El personal lloraba y estaba muy nervioso y a nosotros no nos explicaban nada”, explica con el recuerdo del susto en el cuerpo. “Al final nos juntamos con unos argentinos que acababan de aterrizar y les contamos lo que habíamos vivido”, pero cuando parecía que todo había pasado volvió a venir otro grupo de gente. “Ahora eran disparos. Y como estábamos en la otra punta del aeropuerto no pudimos hacer nada para salir hasta que uno que venía con nosotros rompió un cristal y huimos a las pistas de aterrizaje”.

“No hemos dormido en toda la noche. Estamos tirados en el suelo”

Una vez fuera, la pareja fue llevada a un descampado hasta que fue revisado todo el aeropuerto. Les dieron agua y algo de comida pero a los 15 minutos les subieron al autobús y les invitaron a salir del aeropuerto a la ciudad de Estambul. “Con el miedo y sabiendo que fuera el asunto estaba peor, no hemos salido. La desde las 2 de la mañana hasta las 5 hemos  esperado respuesta hasta que les han dado vuelo para 1:30 de la madrugada.

Tanto ella como su marido se encuentran bien, aunque muy nerviosos todavía. “Imagínate como estamos, con ganas de dormir y dejar de estar en tensión. No hemos dormido. Hemos estado tirados en el suelo”, dice ella mientras esperan salir del aeropuerto dentro de unas horas.