Andrés Campos se presenta a la Secretaría General de los socialistas torrentinos

Los socialistas torrentinos eligen esta tarde en la sede de la Mancomunitat a partir de las 19:30 horas a su nuevo secretario General tras la dimisión de Pepe Veiga el pasado 22 de mayo. Por el momento solo se ha presentado la candidatura del portavoz municipal, Andrés Campos, que de esta forma controlaría también el partido. Por primera vez en la historia, el PSPV local ha negado la presencia de la prensa durante el desarrollo de Asamblea General, de forma que solo se podrá tomar fotografías antes o después de las votaciones y conocer los resultados mediante nota de prensa. Andrés Campos se presenta a la secretaria tras perder las elecciones del 22-M y obtener 9 concejales, pero con un resultado mejor del esperado por las encuestas y un porcentaje de votos superior a la media de la comarca. El nuevo Secretario General se enfrentaría a una etapa complicada con tres años de gobierno del PP por delante en Torrent, la Generalitat Valenciana, y posiblemente a nivel estatal, según las últimas encuestas. Con 29 años de edad, Campos fue elegido candidato para las municipales de 2011 el pasado 17 de septiembre de 2010, hace un año, con un 95% de la ejecutiva, evitando de esa forma las primarias. A pesar de haber apostado por Romeu en lugar de por Alarte, Campos supo unir las aspiraciones de todas las ramas del partido, y ganarse la confianza de Valencia, que prefirió un candidato joven a la alternativa de Ros, o Veiga, que se planteó un año antes de las elecciones. Con esta elección la agrupación socialista de Torrent pondría fin a la renovación total del partido, tras cuatro meses de Junta Gestora, y marcar una etapa de inestabilidad de casi cuatro años. Control total del partido Dentro del partido han surgido voces que han criticado que Andrés Campos haya optado por hacerse también con el control del partido ya que fue uno de los más críticos junto con Encarna Redón por el hecho de que Pepe Veiga asumiera la portavocía del grupo municipal y también la secretaría General. Estas mismas fuentes han criticado que no se deje entrar a la prensa por primera vez, ya que “desde siempre la Asamblea ha estado abierta incluso a simpatizantes, y significaría cerrar las puertas a mucha gente”, y lo consideran un gesto dictatorial más en la forma de actuar del actual portavoz.