La calle Azorín vuelve a ser propiedad municipal tras pagarse 193.000 euros

Los coches podrán pasar por la calle Azorín sin temer a que sea cortada por su antiguo dueño. El Ayuntamiento de Torrent ha pagado más de 193.000 euros para acabar con el litigio abierto por la propiedad de un tramo de la calle urbanizada sin la necesaria cesión de urbanística para vías y jardines. El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha establecido el precio por la expropiación de una superficie de los 348 m2 que se encontraban urbanizados desde hace tiempo por el consistorio. El enfrentamiento, que derivó en un corte de la calle por orden judicial, a petición del propietario legal, Vicente Andreu, acabó en los juzgados que finalmente han establecido el precio de la expropiación. El propietario, que no conocía de la propiedad de la misma, se enteró al reclamarle el mismo Ayuntamiento una deuda impagada por ese terreno que supuestamente debía haberse cedido urbanísticamente, pero en ese momento la legislación no obligaba expresamente a realizar las correspondientes cesiones urbanísticas al municipio para viales, por lo que la parcela permanecía a nombre de su propietario original. El ayuntamiento que consideraba la calle de uso público desde hace muchos años defendió en el juicio que el propietario "había tenido su aprovechamiento urbanístico al construir una finca". Sin embargo, el embargo fue lo que le dio base a Vicente Andreu para reclamar el suelo y la Audiencia provincial años después la justicia le dio la razón sobre la propiedad de los 348 m2 con el derecho a ocuparlos y vallarlos, cosa que hizo levantando el revuelo de los medios de comunicación y vecinos. La situación forzó al Ayuntamiento que presidía entonces Jesús Ros a iniciar la expropiación forzosa y urgente para recuperar el suelo en el año 2005.