La Mancomunitat denuncia que asume un 60% de los servicios sociales de Generalitat
LOS AYUNTAMIENTOS RECLAMAN UNA REVISIÓN DE COMPETENCIAS Y DE POLÍTICAS DE FINANCIACIÓN MUNICIPALES
Según el estudio publicado por la Fundació Horta Sud, las transferencias de responsabilidades a los municipios no se traduce en un volumen presupuestario acorde, lo cual limita la capacidad de actuación de los mismos. El estudio: “Las dos caras de las políticas sociales de l’Horta Sud: restricciones presupuestarias e iniciativa local”, de Marcela Jabbaz, revela que el Plan Concertado de Prestaciones Básicas tenía una pauta de financiación proporcional entre el Estado, las Comunidades Autónomas y las Corporaciones Locales.
Al acto de presentación asistieron un centenar de personas y en la presentación participaron la presidenta de la Mancomunitat Horta Sud, Empar Navarro, el president de la Fundació Horta Sud, Alfred Domínguez, el coordinador del estudio, Antonio Ariño, la autora, Marcela Jabbaz y los representantes de la obra social de la CAM, Benito Nemesio. El estudio revela que la Comunidad Valenciana es la autonomía que menos invierte en Bienestar Social de todas las consideradas en el estudio, 628 € por habitante frente a los 2.326 € por habitante de La Rioja, es decir casi cuatro veces menos que La Rioja y tres veces menos que Castilla y León.
En el estudio se analizan las asimetrías que se producen en torno a la posibilidad de acceso a prestaciones de bienestar social, de acuerdo al territorio de residencia de la ciudadanía.
Otro dato que rebela el estudio es que el porcentaje del presupuesto del área de Bienestar Social de la Generalitat Valenciana ha descendido un 0’4% en los últimos 20 años, en el año 1985 suponía un 4’6% del total del presupuesto y en el 2005 representa un 4 % del presupuesto total. También se destaca en el estudio la tendencia de la Generalitat Valenciana a priorizar la gestión privada de los servicios sociales especializados. En el presupuesto del 2005 de la Conselleria de Bienestar Social el 21 % era para servicios gestionados por empresas privadas frente al 16% de trasferencias a las entidades locales públicas.
El estudio que dio origen a este libro surge de un convenio entre la Fundación para el Desarrollo de l´Horta Sud y la Universidad de Valencia y fue dirigido por el Prof. Antonio Ariño.
Se trata de un libro que analiza el funcionamiento y la estructura del sistema de servicios sociales en la Comunidad Valenciana, desde sus orígenes, alrededor del año 1982, cuando comienzan a crearse los primeros servicios sociales en algunos municipios y su evolución, hasta la actualidad.
A través de entrevistas con trabajadores sociales de los 20 municipios que integran la comarca, se identifica la franja de población atendida (y la que no lo es) por los servicios sociales, las necesidades prioritarias, las dificultades, y se identifica también la existencia de un círculo vicioso en la aplicación de las políticas de bienestar. Como consecuencia de lo cual se produce un burnout (o “estar quemado”) que afecta la salud de los trabajadores y trabajadoras que implementan estas políticas, por encontrarse en medio de las demandas de la ciudadanía y las dificultades administrativas y presupuestarias para satisfacerlas.