Torrent encarga mediciones de los niveles de ruido de las fiestas

Lo dijo en público, a través de las cámaras de Tele Torrent en el pasado pleno fallero que reúne a los presidentes de fallas tras una pregunta del presidente de la falla Lope de Rueda. Alex Linares preguntaba por la forma de otorgar los permisos por las quejas de los vecinos por una actividad organizada por otra asociación. Tras pedir “sentido común” a la hora de administrar los cortes de calles y los niveles de ruido acabó por avanzar que se iban a tomar mediciones de ruido en las verbenas de este verano y otros actos, lo que abrió el melón y un debate que alargó lo que debía ser una Asamblea ligera y sin sobresaltos.

Los primeros en ser controlados fueron los festeros de Moros y Cristianos, que en plena fiesta de la cerveza se encontraba con un ingeniero tomando niveles de ruido a través de un sonómetro a penas a unos 5 metros de los altavoces. Sorprendidos, varios festeros le preguntaron para recibir la noticia. Esa misma tarde también se midieron el certamen de bandas de las Negaciones de Pedro, y según aseguraba el ingeniero de la Universidad Politécnica, se iban a hacer mediciones de fiestas y verbenas y todo tipo de actos.

Según aclaró el concejal de Fiestas, Alfred Costa, se está llevando a cabo la elaboración de un mapa sonoro de la localidad para poder medir los niveles de contaminación acústica de las actividades lúdicas, festivas y tradicionales que se llevan a cabo al aire libre para que tanto los organizadores como los vecinos puedan convivir, teniendo por primera vez en la historia la información sobre los focos sonoros, y de este modo adecuar todas estas actividades a los márgenes de sonidos que están establecidos por la ley”.

Costa señaló que estos sonómetros se colocarán en los puntos donde se desarrollen las actividades y aclaró que hay que ser conscientes de «los condicionantes físicos y ambientales de cada entorno ya que “no se alcanzan los 90 decibelios con la misma facilidad en la plaza Mayor, como en la calle de San Pedro, y las molestias a los residentes no son las mismas”.

Ante la preocupación de los presidentes de fallas, Costa señaló que no se va a sancionar, sino a tomar datos para que “si llega una denuncia podamos defendernos y estar seguros de que cumplimos la legalidad”, y recordó a los presidentes que las mediciones se realizarán en suelo público y no dentro de los casales, porque “ninguna sede festera está autorizada para tener ambientación musical” que tan solo disponen salas como Lo Rat en el casco urbano.

El ruido del tráfico supera en Torrent los 60 decibelios recomendados en el 53% de la ciudad

A pesar de que la mayoría de las quejas por ruido son de fiestas y actividades en la calle, un informe de 2013 señalaba al tráfico como el mayor problema para la ciudad, donde el 53% de los vecinos se veían afectados por niveles de ruido superiores a 60 decibelios. El tráfico en la calle Valencia, Camí Reial, la autovía del By Pass, el corredor comarcal y la autovía Torrent-Valencia, principales puntos de actuación según el estudio del Laboratorio de Ingeniería Acústica de la Escuela Pública Superior de Ingenieros Industriales de la Universidad Politécnica.

El anuncio de mediciones de ruido a las fiestas ha reavivado la paralizada ordenanza sobre el ruido, que debía haberse aprobado en 2014, un año antes de elecciones, y se ha quedado dormida en los cajones. El gobierno de turno en 2014, del Partido Popular, aseguraba que la ordenanza pendiente de elaboración no debería contemplar necesariamente ninguna Zona Altamente Saturadas (ZAS) por el ocio nocturno o actividades festivas o vecinales.

El Plan Acústico Municipal (PAM) del término de Torrent se presentó en agosto y fue votado el pasado mes de octubre por el pleno municipal con el voto favorable de PP y PSOE.  El documento de 147 páginas que se puede consultar en la página web municipal fue publicado oficialmente en el DOGV de la provincia el pasado mes de noviembre de 2013.

Las principales causas de ruido en la ciudad que se señalaban era el Tráfico (61%), la actividad agraria (22%), la actividad vecinal (12%), el tráfico ferroviario (3%) y la actividad industrial (2%).  Según el estudio, el tráfico es la principal fuente de ruido. La práctica totalidad del núcleo urbano superaría los 10 decibelios (dba) recomendados de ruido por la noche, especialmente las zonas de El Vedat-Monredondo, Xenillet o Parc Central por el tráfico rodado de las autorvías. Por el día, el 53% de las vías urbanas de la ciudad supera los 60 dba recomendados, y el 21% de las calles superarían los 65 dBA permitidos.