Na Violant y Omeyas muestran sus ejercitos en la Baixà

Moros y Cristianos revivieron el primer desfile de hace veinticinco años en Torrent. Cerca de un millar de festeros y más de cinco mil personas presenciaron la bajada de los ejércitos de ambos bandos, comandados por Rosa Ortí y la filà Naviolant d'Hongria, y por Sergio Martí, de la comparsa Omeyas. La bandera de la cruz fue portada por Pepe Fajardo, de los Hospitalaris, que además de ostentar la alferecía, cumplían veinte años de su fundación como primera filà cristiana. La bandera de la media luna fue portada por Amparo Medina, alferez mora de Muladins.

El ejército cristiano desfiló con 20 escuadras. La orden de Montesa abrió el desfile del ejército cristiano pasadas las ocho de la tarde. Le siguieron ballesteras, Conqueridors i Contrabandistes con sus animadas composiciones festeras. Tras la alferecía le siguieron Forquers, y los Comilitones, que este año optaron por desfilar en escuadras después de hacerlo dos años como un batallón. Tras los templarios le siguieron los Cavalleros i Damas del Cid, que portaron una escuadra de bárbaros. A estos le siguieron los Guardians con sus trajes oficiales, y la capitanía.

Los piratas berberiscos, que estrenaban traje propio negro este año fueron los primeros en salir este año en el bando moro. A estas dos escuadras le siguieron 32 más. Entre ellas, las huestes de Beduins, las escuadras de negros de Abassies, y los Alfaquies y Almohades todos con trajes alquilados. Tras la alfercía salió la comparsa Buadins, que celebraban este año su 25 desfile con una escuadra con los clavarios que desfilaron en 1988. Con 10 escuadras, la comparsa más numerosas, llenaron de color y música gran parte del desfile. Tras ellos, desfilaron Sumayl`s, Califats Sarraïns y Benimerinas. Cerró el bando moro Almoravits, que presentó el nuevo traje oficial del masset.

Boatos Cristianos

Los caballos, bailes y estandartes protagonizaron este año los boatos de las capitanías y alferecías. La alferecía cristiana destacó en su entrada la lectura de la carta pobla de la ciudad de 1248, que fue seguida por la presencia del abanderado acompañado de sus hijos, del alférez, Pepe Fajardo, y su mujer. El boato de la capitanía cristiana comenzó con la entrada de estandartes de poblaciones donde hay fiestas de moros y cristianos. Al la primera escuadra le siguieron acróbatas bailes y dos escuadras completas subidas a caballo de damas de Na Violant, que estrenaron traje oficial con túnica blanca. La capitana, Rosa Ortí completaba los ejércitos cristianos sobre un anda portado a hombros con un traje de tonos amarillo y violeta.

Boato Moro Muladí y Omeyas

En el bando moro, la alferecía Muladí presentó una elegante presentación oriental con un baile espectacular al que siguieron dos escuadras y la alferez Amparo Medina, con una larga trenza y portada en un carro decorado de flores. El desfile de la capitanía Mora destacó el viaje de los Omeyas en su conquista por España. Comenzó con la entrada de estandartes con tres camellos y soldados, a los que le siguió un mercado de animales con cabras y asnos. Tras ellos, dos caballos batidores enamoraron a los espectadores con sus movimientos. Una espectacular danza vista hace dos años en Alcoy que simulaba un mar fue lo más llamativo de un boato que completó Sergio Garcia sobre una carroza, acompañado de su hijo Sergi.