SEMANA SANTA 2012
El Encuentro Doloroso acaba también precipitadamente por la lluvia
ANTES DE INICIARSE EL ENCUENTRO SE HA DECIDIDO LEER SOLO LA DECIMOQUINTA ESTACIÓN DEBIDO AL AGUA QUE CAÍA
Precipitadamente, y entre paraguas el Encuentro Doloroso ha acabado antes de tiempo. El agua no ha respetado una de las procesiones más importantes de la Semana Santa torrentina que tampoco ha podido disfrutar este año del Encuentro de la Verónica. Mojados y desilusionados las vestas veían como quedaba aguado otro de los actos más esperados por los torrentinos. Afortunadamente, el sol ha salido reluciente poco después y la previsión del tiempo es buena para celebrar el Santo Entierro y también el Domingo de Resurrección, que se espera despejado. VER FOTOGRAFIAS EN FOTOTECA O http://www.laopiniondetorrent.es/fotos/48300
La mañana había comenzado encapotada y con previsión de lluvia, pero los cofrades no han querido quedarse este año sin una de sus procesiones más importantes. El frío ha hecho que hubiera menos gente que años anteriores para presenciar la lectura de las 15 estaciones por parte de los hermanos mayores y la Reina del Encuentro, que este año se ha desplazado junto a la Torre.
Sobre las nueve de la mañana salían las imágenes de Jesús Nazareno desde la Asunción y la Virgen de los Dolores desde el Convento. Con mucho viento, aire de lluvia que anunciaba lo que podía pasar, y efectivamente pasó. Cuando las dos imágenes llegaban ya a la plaza comenzaba a chispear y se abrían los paraguas. Inmediatamente se bajaba el paso de la imagen de la Virgen de los Dolores para protegerla, y poco después lo hacía el Jesús Nazareno.
Cuando se procedía a leer la lluvia, se ha intensificado mojando los papeles de lectura por lo que para salvaguardar las imágenes y las vestas se ha decidido leer solo la decimoquinta estación por parte de Conchín Gómez, la Reina del Encuentro, protegida por un paraguas. Sin más ceremonias, las dos imágenes se han cruzado desluciendo un Encuentro Doloroso en el que por primera vez en muchos años ambas imágenes no pudieron mirarse directamente a los ojos por los plásticos que les protegían.
La lluvia ha dejado a muchas vestas con las capas mojadas y el capirucho húmedo justo solo unas horas antes de la procesión general del Santo Entierro que si en años anteriores ha estado amenazada por la lluvia e incluso suspendida, parece que en esta ocasión va a ser de las pocas procesiones donde lo verdaderamente importante no va a ser las inclemencias del tiempo sino el fervor religioso de los torrentinos.